Los procesos de la naturaleza responden a un número de variables que van de mayores a infinitesimales. ¿Cuál camino escogerá el rayo para crear el arco voltaico que vemos mientras salta de gota en gota? No hay forma de hacer un modelo que lo prediga, pues las variables son tantas como gotas de agua grandes o microscópicas hay entre la nube y el suelo. Mientras más dispersa y desorganizada están las gotas de agua, menos predecible es la ruta, hasta que el caos en el modelo es tal que lo único predecible es que no habrá rayo.
Doblar en "U" desde el segundo carril aporta caos al modelo de giro a la izquierda en las avenidas; sin embargo pasa todos los días. Esos Elementos Caóticos no logran detener el modelo; con "mentarle su madre" se ventila el calentón y a otra cosa. Si usted es Senador porque le "costo sus cuartos" la democracia sigue adelante, de todas formas tenemos a Pelegrin. Si usted ganó un concurso y la obra se la dieron a un socio del ministro, pues no le trabaje al gobierno, de todas formas no pagan ni con sentencias irrevocables. Si a usted le "clonaron" la cedula y vendieron su solar, búsquese un socio guardia o policía, que le saca la gente a patadas en lo que se aclara la cosa.
Si es usted el que dobló a la izquierda desde el segundo carril, esta "jarto de hacerlo y no pasa ná". Si usted se hizo Senador comprando votos, con lo del barrilito sigue comprando reelecciones y no importa si cae preso por traficar chinos, usted es inmune. Si usted es socio del ministro y "tumbó" un concurso a unos pariguayos, se compra una villa en La Romana y lo invitarán hasta a los Tedeum. Si sacando la gente que le robaron el título matan a dos o tres, por 50 mil pesos su socio policía le "fuga" uno que ya está preso en La Victoria que se declara culpable.
La conducta impune del Elemento Caótico frente al modelo social fomenta su Sentido de Invulnerabilidad. Esa sensación todos la tenemos; en mayor grado cuando somos niños, pues la ignorancia nos hace descartar el peligro. Los Elementos Caóticos por el contrario, alimentan su Sentido de Invulnerabilidad con cada nueva acción impune contra el modelo de comportamiento social civilizado.
En ese Sentido de Invulnerabilidad hay una parte de la explicación del desorden creciente de la sociedad dominicana. Ese que dobla a la izquierda desde el segundo carril, si no se mató esta Semana Santa lo hará en una próxima. Solo hace falta que se encuentre con otro Caótico que está "jarto de comerse los semáforos en rojo y no pasa ná". Los partidos políticos están haciendo su parte; a medida que la rentabilidad de los puestos públicos crece, más cara se hace la competencia para comprar los votos de accederlos. Esto a su vez obliga a robar más descarada y rápidamente. El ingeniero que se robó el concurso cogerá el avance para la villa en La Romana y además un apartamento en Miami. Siendo socio del ministro no tiene que gastar tanto en varillas y nadie nota media pulgada menos de plato. Si al que le "clonaron" la cédula para robarle la tierra no obtiene justicia obtendrá un arma, con suerte lo matarán junto con dos o tres que mate él.
Parece inevitable que ha de ponerse peor antes de que comience a mejorar. ¿Cuál será el punto de inflexión de la curva? ¿Sera cuando ni vida ni hacienda sean seguras?
La gran masa no valora las tendencias, sólo ve los hitos en los eventos sociales. La muerte de las Mirabal en el 60 fue un hito que marcó el fin de Trujillo. ¿Cuál será el evento que le dirá a la sociedad dominicana actual que la corrupción y el desorden nos disolverán como nación?
No se la respuesta, pero voy a aventurar una hipótesis: En los próximos meses habrá una víctima que nos hará estremecer. Será el daño colateral de dos desaprensivos; o las luchas intra o inter partidarias pasarán a vías de hecho; o será la construcción deficiente que haga una masacre; o quizá un evento como el de Nagua.
No me interesa imaginarme todas las posibles consecuencias del comportamiento caótico. Pero pasará.
LOS QUE QUEREMOS LA DECENCIA SOMOS MAS.
21 de abril del 2009.
2 comentarios:
Y tú parece que me clonaste el pensamiento... este último sábado por la noche entré en pánico mientras cenaba con una visita del extranjero, y les contaba el caos en el que veía sumida a la sociedad dominicana. Y eso de doblar a la izquierda desde el segundo carril es el que me tiene más encojonado, porque no entiendo quien le dijo al vivo que se adelanta en la fila desde el segundo carril, que él tiene más prisa que los pendejos que hicimos la fila. Un día, así sea yo mismo, que se encuentre con el caótico que se roba los semáforos... así tendremos dos caóticos menos...
Muy buena entrada Federico.
La complejidad de la trama social no nos permite predecir por donde vendrá el espanto, por donde caerá el rayo social que nos sacuda, pero viene.
Como dice Benedetti, "lento, pero viene"
Un abrazo,
Mario
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